Por Claudio Acosta
Si usted quiere reírse ríase, está en todo su derecho, pero no fue un chiste. O por lo menos no creo que esa haya sido la intención del expresidente Danilo Medina, cuando afirmó, en una entrevista, que con la Consulta Ciudadana que realizará el PLD para medir la simpatía de los cinco aspirantes presidenciales que se disputan la candidatura están ofreciéndole “un producto nuevo” a los votantes, lo que a su juicio hará posible que los peledeístas ganen las elecciones.
Según su razonamiento, el hecho de que ninguno de esos aspirantes, todos fichas bien conocidas por ya que en menor o mayor medida guisaron en los gobiernos peledeístas, haya sido candidato a la Presidencia es lo que convierte al favorecido en ese producto nuevo que encandilará al electorado. Así de simple, así de sencillo, así de fácil.
No tiene mucho sentido discutir la validez de un razonamiento tan simplista; y si el presidente del PLD, y junto a él el resto de los peledeístas, quieren creer que Margarita Cedeño, Abel Martínez y Francisco Domínguez Brito, son “productos nuevos” ese es su problema.
Tampoco vale la pena discutir su afirmación de que se mantendrá neutral en el proceso de escogencia del candidato presidencial, pues si los peledeístas, que conocen sus mañas y dobleces, difícilmente creerán en esa neutralidad, no tengo nada que agregar.
Lo que sí es un hecho medible y verificable, independientemente de quien resulte ganancioso el próximo domingo, es que ninguno ha tenido, hasta ahora, un impacto significativo en el electorado que justifique que el expresidente Medina, se mostrara tan optimista, o eso se empeñó en parecer.
Aunque no lo suficiente para convencer a este país, que sabe de qué pie cojean los peledeístas que nos gobernaron durante veinte largos años, de que el PLD nos ofertará un producto nuevo en el 2024, cuando lo que estamos viendo es a políticos que, en su mayoría, están más quemados que un trapo de plancha. Como dice el pueblo.
El autor es: Jefe de Redacción en horario vespertino del Periódico Hoy
*